Comida de navidad en Catalunya.

En españa son tipicos los cocidos de invierno y casi en cada punto de la peninsula existe un caldo tipico, Caldo gallego en Galicia, cocido madrileño en Madrid, El marmitako en Euskadi o Escudella i carn d'olla en Catalunya

La Navidad en Cataluña se celebra en dos días muy concretos , 25 de diciembre, Navidad y 26 de diciembre Sant Esteve. Son días en que suelen reunirse toda la familia

Para estos días existen unas comidas muy tradicionales y podemos decir que se realiza una comida de aprovechamiento y reciclage.

El día 25, Navidad se sirve en la mesa la escudella i carn d'olla, una sopa sustanciosa con pasta, carnes y verduras, seguida de platos principales como el pollo relleno o asado.

El 26 de diciembre, día de San Esteban, es costumbre preparar canelones para aprovechar las sobras del caldo. Los postres típicos incluyen turrones y neules (barquillos).

· Escudella i carn d'olla:

Es el plato más emblemático. Se cocina a fuego lento durante horas con una variedad de carnes (cerdo, ternera, pollo), verduras y una gran albóndiga llamada "pilota".

Para esta ocasión la escudella que se sirve con pasta en forma de caracola (galets).

La escudella i carn d'olla o sopa de Navidad, es una sopa típica de invierno que es tradicional de Cataluña. Ya en el siglo XIV, el franciscano Francesc Eiximenis describe la sopa de macarrones como un plato cotidiano de los catalanes.

Se caracteriza especialmente por usar en el cocido una pilota, que es una gran albóndiga alargada que una vez cocida se corta a rodajas para repartirla entre los comensales, hecha con carne picada mezclada con tocino, huevo batido, miga de pan o pan rallado, ajo y perejil, y que se pasa por harina y se dora un poco antes de ser cocida en el agua que dará el caldo. Además para hacer el caldo se utilizan verduras (zanahoria, nabo, apio, puerro, col verde, etc.) y eventualmente también otros ingredientes, como garbanzos, patata, butifarra negra o blanca, o diferentes tipos de carne y huesos que pueden variar según la familia, la región donde viven, la estación del año y la ocasión.

Primero se sirve La escudella ("sopa", en catalán), que es la sopa propiamente dicha, es decir el caldo con con galets, que es una pasta de trigo en forma de caracola, después de sirve La carn d'olla se coloca en una bandeja ovalada que se lleva a la mesa y de donde se sirve cada uno, con la pilota y las verduras usadas en el hervido (también, si hay, las otras carnes, patatas o legumbres), escurridas, que se pueden aliñar o no con aceite de oliva.

A continuación de la escudella i carn d’olla se sirve el pollo o pavo asado, que suele estar acompañado de ciruelas y pansas y relleno de carne picada de cerdo.

Para finalizar con los típicos dulces de turrón, mazapán y neules. que es una galleta muy fina y crujiente que se elabora con forma de canutillo. Es muy similar a los barquillos, aunque la receta puede variar. Se trata de un dulce que tiene su origen, como muchos otros en el ámbito religioso. Los primeros datos se fechan en el siglo IX, aunque fue en el XII cuando se extendió su consumo en los refectorios de conventos y monasterios.

Canelones:

El 26 de diciembre, coincidiendo con la festividad de San Esteban y en plena Navidad, en los hogares catalanes se cocinan los canelones de San Esteban o canelones de Navidad. En Cataluña tradicionalmente se prepara este plato como forma de aprovechamiento de los restos de la carne que haya sobrado en la comida de navidad, donde lo tradicional es preparar la escudella catalana i carn d’olla.

No todos los historiadores de la cocina están de acuerdo en que los canelones sean un ejemplo de la cocina de reaprovechamiento. Néstor Luján lo defendía, pero el historiador de la cocina Jaume Fàbregas dice que es una leyenda.

Aunque pueda parecer que los canelones se comen desde tiempos ancestrales, son una costumbre reciente: no aparecen en ningún recetario catalán hasta principios del siglo XX.

Los canelones son un plato de origen italiano que llegó a Cataluña a finales del siglo XVIII de la mano de los cocineros extranjeros que trabajaban en las primeras fondas.

En el siglo XIX restaurantes emblemáticos como la Maison Dorée popularizaron los canelones entre la burguesía, que los percibía como un manjar muy refinado.

Hay una diferencia básica entre los canelones catalanes y los italianos: en los nuestros, primero se cuece la carne y después se trincha, mientras que los otros se hacen directamente con carne picada.

La principal dificultad para elaborar canelones no era el relleno, sino la pasta, que debía hacerse a mano. Eso se acabó en 1911 gracias al empresario Ramon Flo y su marca de pasta El Pavo, que comercializó las primeras placas secas, este avance técnico significó la popularización definitiva de los canelones: muchos restaurantes los empezaron a servir y, sobre todo, llegaron a las casas y con la popularización de los canelones vino la diversidad: cada hogar tiene receta propia y hay más de cien documentadas.

La receta básica de los canelones lleva carne de cerdo, ternera y pollo acompañada de un sofrito de cebolla y tomate, pero el tipo y la proporción de la carne puede variar mucho. Hay quienes los hacen con tocino, cabeza de lomo, jarrete… También hay recetas que dan más papel a la ternera o al pollo.

La salsa es otra de las estrellas del plato. Generalmente, los canelones se riegan con bechamel, una salsa de origen francés que debe su nombre a LouisBéchameil de Nointel, maître del rey Luis XIV. También hay cocineros que rebajan la salsa bechamel con un toque de salsa de tomate, que le da un color ligeramente rosado.