El bosque pintado de Agustín Ibarrola



Foto: C. ICARIA
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El bosque pintado o bosque de Oma  (en euskera: Omako basoa) está situado en la Reserva Natural de Urdaibai, en una de las laderas del Valle de Oma, en la localidad de Cortézubi, cerca de la Cueva de Santimamiñe,

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Es una obra del pintor escultor Agustín Ibarrola realizada  entre los años 1982 y 1985 pintando en los troncos de los árboles, figuras humanas , animales y geométricas, algunas de los cuales solo se hacen visibles desde posiciones determinadas, en las que las imágenes de distintos troncos forman una imagen conjunta. Es un espacio mágico que apunta una nueva relación entre naturaleza y arte. En él, el artista dejó huellas en árboles y piedras, con el propósito de unir el trabajo de los ancestrales artistas del Paleolítico con la tendencia moderna del land art, una corriente artística que trabaja directamente sobre el entorno natural y tiene como objetivo trasladar el arte a la naturaleza, utilizando el paisaje como marco y soporte de partida semejante al lienzo del pintor.
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De esta forma, Ibarrola se limitó a pintar la superficie de los pinos, consciente de que el soporte que utilizaba no es inerte como el lienzo. La mayoría de las figuras se reparten entre diferentes arboles, situados en distintos planos de profundidad. Así, Ibarrola, al cubrir de colores y de vida cientos de pinos, compuso un inmenso lienzo que cada visitante puede recomponer jugando con las perspectivas mientras camina. Nos encontramos ante la posibilidad de construir una obra personalizada por medio de las decisiones que tomamos en el interior del bosque, caminar por uno u otro sendero, mirar en diferentes direcciones... Existe, por lo tanto, un bosque diferente para cada uno de los que lo visitan.

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A primera vista las pinturas no nos dicen nada, sólo es cuando nos ponemos en cierta posición, indicada por las flechas del suelo, y ya podemos ver el dibujo formado por la unión de varios troncos de árboles.  Un circuito permite contemplar el paraje desde los más diversos ángulos. En todos sorprenderá el escorzo de una fantástica figura o la inquietante presencia de formas desconocidas  El bosque de Oma tiene un total de 47 figuras pintadas

No hay duda de que la obra maestra de Agustín Ibarrola se sitúa en el extremo de la creación artística y se convierte en un diálogo particular entre un artista y la naturaleza.
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El bosque pintado de Oma, el gran espacio de libertad que ha sido atacado por intolerantes, Un centenar de pinos del frondoso paraje sufrió el zarpazo de locura y odio y amenazaron de muerte al artista, fundador de Foro de Ermua y miembro de ¡Basta ya!.
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Agustín Ibarrola ha sido un artista comprometido con los valores sociales. Fue encarcelado en la década de los sesenta y setenta por sus participaciones en huelgas obreras y su militancia comunista, entonces condenado a la clandestinidad

 Las instituciones vascas, se conjuraron para «defender» el bosque pintado de Oma, escenario único de nuestra geografía sentimental y cultural. «Un símbolo de paz y entendimiento» frente a quienes amenazan «la vida y la libertad», proclamó el Parlamento vasco en 2003. Un año después tuvieron lugar los trabajos de reparación de la obra dañada.
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El paso del tiempo también es implacable, Ibarrola pintó sobre los árboles consciente de que el soporte utilizado «no es inerte como el lienzo, sino un organismo vivo», Tres han sido las principales formas de deterioro detectadas: la desaparición de la policromía, la decoloración de las tonalidades y la ocultación de las unidades estéticas por la vegetación incontrolada.
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La Diputación de Bizkaia y la Universidad del País Vasco (UPV) elaboró un proyecto de conservación, que se presentó a Ibarrola, y se firmó un convenio de colaboración con la UPV para llevar a cabo un proyecto de investigación y desarrollo de recuperación, en el periodo de 2013 a 2015.

Este proyecto, cuenta con un equipo multidisciplinar dirigido por el doctor Fernando Bazeta Gobantes, profesor titular de la Facultad de Letras de la UPVMaría Teresa Escohotado Ibor, catedrática de Conservación y Restauración de Bienes Culturales en la Facultad de Bellas Artes de la UPV,  especializada en el estudio e intervención de obras de arte contemporáneas, y Ainhoa Rodríguez López, doctora europea de Conservación y Restauración de Bienes Culturales por la UPV
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Tras el censo y catalogación de los árboles y la situación de desarrollo vegetal del bosque, se procederá a repoblar los pinos muertos pintados y se dará también un mayor difusión del conjunto artístico-natural de Oma, patrimonio de la libertad.

«Es un patrimonio nacional vasco que tiene importancia en todo el mundo. Ya es de la Humanidad», ha declarado Ibarrola, que suele recorrer a menudo este paraje idílico



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Ficha:
·                                 Distancia a recorrer: 7,4 Km
·                                 Desnivel máximo: 204m
·                                 Horario aproximado: 2 horas para el paseo más el tiempo que queramos dedicar a la visita del Bosque.
·                                 Accesibilidad: el Bosque de Oma no está acondicionado para la visita con sillas de ruedas o carros de bebé.
·                                 Servicios: Parking, Área Recreativa  y Bar-Restaurante


Fuentes:








http://www.abc.es/cultura/arte/20140320/abci-bosque-ibarrola-201403192032.html

Comentarios

  1. Un bosque entantador, es precioso ver arte en otro arte, la naturaleza. ( Kika )

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  2. Algunos autores entienden el arte como la manipulación de la realidad o de la naturaleza. En este caso se manipula directamente la naturaleza creando otra naturaleza paralela y diferente para cada espectador, no solo por la comprensión del mensaje a partir de los conocimientos previos del espectador, también cambia el mensaje dependiendo de la ubicación física del espectador en cada momento, escapando y creando realidades en ocasiones no previstas por el autor.
    Es cierto que algunos "puristas" ecologistas han criticado esta obra como un ataque y agresión a la naturaleza por pintar sobre los arboles.Claro que sin la transgresión no hay avances.

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